Para poder trabajar el desapego más auténtico es importante que dejemos de mirar fuera de nosotros mismos. Dejar de creer que la causa de lo que nos ocurre o de lo que sentimos está afuera de nosotros mismos.
Esta la única manera de poder desapegarnos de todo lo que creemos, de todo lo que nos genera miedo culpa y sufrimiento.
SESIÓN GRATUITA CUESIONAR CREENCIAS Y TRABAJAR EL DESAPEGO
Cómo Trabajar El Desapego Auténtico
Cuando empezamos a ver que lo externo es un reflejo de lo que interno estamos el camino se acorta. Tengo que empezar a mirar cuál es la creencia, la idea o el mecanismo mental que estoy sosteniendo y que estoy creyendo para percibir lo que estoy viendo libido-de.com.
Muchas veces, nos confundimos creyendo que la causa siempre está en algo externo, pero a veces, podemos sentir cualquier herida, sea una herida de abandono, rechazo o del tipo que sea y creemos que el origen está en un programa heredado, en vidas pasadas, pero esto es seguir creyendo que el origen está fuera de mí
Todo se simplifica cuando aceptó la idea más radical que es: todo me lo hago a mí mismo. Todo lo que experimento es mi propio deseo más profundo de querer experimentar la separación, de creer que hay un mundo fuera de mí que no tienen nada que ver con quién soy.
Si somos capaces de aceptar esta idea estamos yendo de forma directa a la causa y al pensamiento original de todo aquello de lo que nos sucede.
Una manera es comenzar a observar qué es lo que estoy creyendo a un nivel profundo. Cuáles son mis deseos más ocultos que quiero experimentar. Porque la interpretación que yo haga de lo que estoy viviendo me está hablando de lo que ya estoy creyendo a nivel inconsciente.
Ningún escenario por sí mismo tiene la capacidad de hacerme sentir de una
manera determinada salvo que yo lo esté interpretando de esa manera.
El Desapego Es Cuestionar Lo Que Creemos
Para poder practicar el desapego emocional tengo que tener la profunda honestidad de mirar hasta lo más hondo de mi mente para ver qué es lo que estoy sosteniendo.
Y una vez que soy capaz de mirarlo entonces podré soltarlo, porque entonces habré identificado cuál es el deseo quería experimentar.
A veces ese deseo puede ser un deseo de sentirme rechazado, de sentirme aceptado, de sentirme reconocido, de sentirme herido…
En definitiva, no hay ningún deseo positivo ni negativo. Todo no deja de ser un juicio y para practicar el desapego más auténtico tenemos que empezar a mirar sin ningún tipo de juicio, sin ningún tipo de valoración personal.
Deja una respuesta